Más de 2500 jóvenes dispuestos a construir una paz a la.edida de nuestros sueños.

“Esta vez unidos y unidas por la paz a la medida de nuestros sueños, no como una simple consigna, sino como expresión del más profundo sueño transformador de los y las jóvenes del país, entendemos que la idea de este festival, es la idea de que hoy los y las jóvenes derrotamos la indiferencia y abrimos las puertas de la participación en política, como parte activa de las grandes transformaciones que se avizoran en Colombia, construir y llenar de contenido las consignas de la soberanía, de la democracia y de la paz con justicia social, de la diversidad, de la pluralidad y de la heterogeneidad, la juventud colombiana comprende que puede enmarcarse en una lucha decidida sobre la base de estas perspectivas…”

Con estas palabras concluyo el grandioso encuentro que tuvo lugar el pasado fin de semana en la ciudad de Bucaramanga, el X Festival Nacional de la Juventud, proceso del que participaron mas de 2500 jóvenes de todo el país, desde el Cabo de la Vela hasta Ipiales, desde Tumaco hasta Sarabena, jóvenes dispuestos a forjar una paz a la medida de nuestros sueños, que enfrentaron extenuantes jornadas de viaje, que se han reusado a sumirse en el paradigma impuesto por los medios de comunicación, que desafiaron con orgullo la estigmatización, las trabas que la institucionalidad fraguó para obstruir, quizás, el  encuentro juvenil más significativo de los últimos años.

Durante el primer día arribaron a la ciudad los y las jóvenes que cargaban es sus espaldas guitarras, elementos para acampar, tamboras y yembes, ukeleles y cuatros, libros y ponencias, fotografías, denuncias, experiencias y deseos de construir. En el evento de inauguración se agitaron banderas de los procesos secundaritas, universitarios, de los colectivos barriales, de las colectivas feministas, de las apuestas políticas en las que muchos jóvenes del país se organizan para construir esa nueva Colombia.

Al micrófono se sucedieron organizadores del festival, además de  Carlos Lozano director del semanario voz, Rene Ayala coordinador de Prensa Rural y  Dimitris Palmirys, de la Organización Unificada de la Juventud Democrática (EDON) de Chipre y presidente de laFederación Mundial de la Juventud Democrática. En cada una de las palabras se resaltó el éxito de 30 años de trabajo de los festivales nacionales de la juventud, desde donde se han orquestado movilizaciones y procesos de gran envergadura en el país, así como el compromiso de los mismos con la construcción de un país en paz con justicia social.

Foto Tomada por Camilo Cely

En la noche los y las jóvenes dispusieron de sus carpas para instalar el campamento en el velódromo Alfonso López  y en otros sitios adecuados por los organizadores, ya que nuevamente la institucionalidad brillo por su falta de compromiso,  retumbaron guitarras y tambores, y entorno a la palabra se dio paso al intercambio entre regiones, para luego descansar e iniciar el segundo día de trabajo.

El día domingo fue arduo, desde las ocho de la mañana se instalaron los seis ejes de trabajo y a partir de las once se inició la jornada de discusión por mesas, desde temas académico, culturales, religiosos, pasando por cada una de las actividades que caracterizan la vida juvenil y que hoy como movimiento festival reclamamos, no se nos estigmatice, no se nos criminalice, pues, es propio de la juventud transformar para transformarse.

Foto Tomada por Camilo Cely

En las horas de la tarde, finalizando el día nos dimos cita en el auditorio Luis A. Calvo de la histórica Universidad Industrial de Santander, amenazada tantas veces por el paramilitarismo y asediada por los buitres, por los cancerberos del terror, por el escuadrón de la muerte ESMAD. Allí intervinieron Antonio Navarro, representante del movimiento Progresistas; Jaime Caicedo, secretario general del Partido Comunista Colombiano; y la parlamentaria andina Gloria Flórez. En este escenario se hizo lectura de los resultados de un largo día de discusión y las conclusiones que alimentan la agenda de movilización del proceso juvenil.

El lunes estuvo caracterizado por mucha festividad, desde muy temprano se escucharon tambores tumaqueños, y nuevamente  la UIS fue patíbulo de alegría talleres y reuniones por sectores en la mañana, para posteriormente encontrarnos con dos escenarios de concierto donde escuchamos a bandas locales y algunas de las que construyeron en distintas regiones del país el X Festival Nacional de la Juventud.

Alrededor de las 4 de la tarde ingresamos al auditorio Luis calvo, para celebrar con efusividad la declaración política de nuestro X festival y con ella rememorar 30 años de lucha, gritar que estos son los y las jóvenes que han decidido construir junto a todo el pueblo colombiano una paz a la medida de nuestros sueños, y aun como Ulises en su viaje a Ítaca, en las palabra de Kavafis sabemos que

No has de temer ni a los lestrigones ni a los cíclopes,
ni la cólera del airado Posidón.
Nunca tales monstruos hallarás en tu ruta
si tu pensamiento es elevado, si una exquisita

emoción penetra en tu alma y en tu cuerpo.

Nuestro deseo es la paz a la medida nuestros sueños, su concreción es nuestro trabajo en el barrio, en el colegio, en la universidad, en la empresa, en la calle, en el cabildo, en el resguardo, en el campo...

Foto Tomada por Camilo Cely